AUTOBIOGRAFÍA DE JOSUE HONORIO URREA – COORDINADOR DE LA SEDE LUIS ANTONIO PÉREZ


Mi padre me puso por nombre JOSUÉ HONORIO URREA BEJARANO, nací en el municipio de Gachalá (Cundinamarca), hace escasos 54 años, criado en la inspección de Maya (Cundinamarca) del municipio de Paratebueno del mismo departamento, en donde pasé mi infancia con todas las necesidades como cualquier niño campesino.
La primaria la hice por etapas debido a la falta de docentes en la escuelita de la vereda, por lo lejos y difícil acceso los profesores no se amañaban y se iban dejando los años lectivos inconclusos; situación que me llevó a terminar mi primaria en otra vereda.
Después de un año de haber terminado la primaria, un tío logró sacarme una beca para un internado en Gachetá (Cundinamarca) el cual después de 2 años fue clausurado y quedé a la deriva; por esa situación, mi tío me llevó para Bogotá, en donde terminé el bachillerato en el colegio Instituto Monseñor Montini, en el año de 1.988.
Para el año siguiente presté mi servicio militar en Tolemaida (Nilo – Cundinamarca), el resto de año lo pasé en la finca de mis padres porque no había posibilidades de seguir estudiando.
En el año 1.991 el director de núcleo de Paratebueno le dijo a mi padre que necesitaba un bachiller para enseñar como docente en una vereda, al día siguiente me presenté ante él y de una vez fuimos a firmar contrato en la alcaldía por ese año lectivo.
En 1.992 me ofrecieron trabajar en el colegio privado Antonio Nariño, en el municipio de Puerto Gaitán (Meta), me ofrecieron una mensualidad de ochenta mil pesos ($80.000), al final recibí solo cuarenta mil pesos ($40.000) por falta de estudiantes.

En el mes de agosto del mismo año el director de núcleo el Lic. Carlos Octavio Fernández me dijo que si me interesaba trabajar con el municipio y no lo pensé dos veces y de una firmé contrato con el municipio como docente de la sede Camilo Torres.
Ya para el año de 1.993, empecé a laborar en la escuela Luis Antonio Pérez Sánchez, una nueva sede del colegio Jorge Eliécer Gaitán, (como fundador, junto con cuatro profesoras más). En el año de 1.994 validé mis estudios de Normalista Superior, en la Normal Superior María Auxiliadora de Granada. En el año 1.996 fui nombrado como docente municipal en propiedad.
En el año 2.000, por la reorganización de las entidades territoriales certificadas, pasé a ser docente en propiedad del Departamento del Meta; con mucho esfuerzo hice mi licenciatura en el 2.012, año también en el cual fui nombrado como coordinador encargado de la sede Luis Antonio Pérez Sánchez, hasta el momento.
En ese entonces Puerto Gaitán era un pueblito sin pavimentar, con las calles llenas de arena y polvareda en el verano y en el invierno llenas de charcos inmensos; los padres de familia eran mucho más colaboradores, los estudiantes tenían mayor acompañamiento y eran más disciplinados; en la escuela los juegos de los niños eran golosa, yermis, cauchito, canicas, monedas, tazos, trompo, entre otros. En estos 31 años todo ha cambiado de manera rápida en todos los ámbitos, unos cambios para bien y otros para mal, en cuanto a la parte pedagógica en los colegios del país y del mundo.
Han sido muchas las experiencias bonitas en el transcurso de los años, le he enseñado a los hijos y nietos de mis primeros estudiantes, he obtenido gracias a Dios el reconocimiento a mi labor como docente en varias ocasiones, por parte de los colegios Jorge Eliecer Gaitán, Luis Carlos Galán Sarmiento, por las administraciones de los señores alcaldes: Jaime Ballesteros, Edgar Silva y Jorge Plazas, además del reconocimiento de los padres de familia y comunidad educativa en general.
Son 31 años en los cuales han sido de muchas experiencias y satisfacciones al ver graduar a un sin número jóvenes a los cuales les enseñe, hoy son ingenieros, médicos, comunicadores, enfermeros, científicos y muchas más profesiones. Se ha visto el progreso y desarrollo del municipio en el transcurso de estos años. Creo que he aportado lo mejor de mí en mis 31 años de servicio a la educación en el municipio, lo he comprobado en el respaldo de la comunidad educativa, por lo cual puedo decir que he sido un buen ejemplo para la sociedad y que he hecho las cosas bien a pesar de los tropiezos y desaciertos, pero que de ellos se aprende.
Doy gracias a Dios por la oportunidad que me ha dado de ser docente, creo que he aportado mi granito de arena a la educación del municipio de Puerto Gaitán, al cual le agradezco su acogida en el cual consolidé mi familia y lo que tengo. Agradezco también a Dios por la vida, la salud y por ser mi guía en este camino lleno de curvas, subidas y bajadas que son el trasegar diario por la vida en el ámbito de la EDUCACIÓN.
LIC.JOSUE HONORIO URREA BEJARANO


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